PLANTAS DE LUZ
Cuando escuchamos el término “Planta de Luz” probablemente se nos venga a la mente una imagen de una gigante caja de metal con miles de botones y cables conectados en cada uno de los lados de la máquina, como si fuera sacada de una película futurista de los 80´s o puede ser que no.
Lo cierto es que cuando hablamos del tema de plantas de luz se nos vienen las preguntas, ¿qué es?, ¿para qué sirve?, ¿cuántos tipos existen?, ¿cuál es la que a mi más me conviene?, por mencionar solo algunas. Es por eso que el día de hoy te ayudaremos a clarificar algunas de las dudas más comunes referente a plantas de luz.
Comenzaremos por definir, ¿qué son las plantas de luz?
Una planta de luz o también conocida como planta eléctrica, generador de luz o generador eléctrico, es un tipo de maquinaria que se especializa en convertir o generar energía eléctrica a partir de otros tipos de energía. Este tipo de maquinarias son diseñadas para abastecer de energía eléctrica un determinado lugar o zona donde no se tenga disponible, o en el caso de que no exista una instalación eléctrica como suele presentarse en zonas de construcción, lugares de trabajo remotos, fronteras, desiertos, cerros o zonas boscosas; sin embargo, también puede ser utilizada para alimentar una maquinaria o equipo eléctrico.
Ahora que ya tenemos una idea más clara de lo que es una planta de luz, hablaremos de cómo es que funciona. La manera en que ellas trabajan es por medio de la combustión –mejor conocida como quema de combustible– mismo que permite mover un embobinado alrededor de un imán permanente, o en el caso de plantas más grandes un electroimán, para así alimentar el sistema y convertir la energía térmica en energía eléctrica.
Para que las plantas funcionen de manera correcta, se requiere de un pequeño sistema de arranque el cual permita poner en marcha la maquinaria; esto puede ser un pulso de corriente o bien un jalón mecánico. Cuando la planta ya se encuentre en marcha, es momento de comenzar a quemar el combustible de tu elección, los más comunes son gas, gasolina o diesel.
Esta corriente se genera por el principio de la “Ley de Faraday”, la cual indica: “Un conductor al ser desplazado sobre un campo magnético, generará una corriente eléctrica proporcional.”
Existen en el mercado una gran variedad de marcas y modelos de plantas de luz, y la opción que elijas dependerá de la cantidad de energía eléctrica que quieras generar. Hay diversos tipos y dimensiones que específicamente resuelven diferentes necesidades.
De acuerdo con lo anterior podemos dividir las plantas de luz en diferentes tipos, tales como:
- Plantas de Diesel: Su principal componente, como su nombre lo dice, es el combustible diesel. Este tipo de generador eléctrico tiene una capacidad de abastecimiento entre 8 hasta 30 KW en su gama baja. La energía que se genera de esta máquina puede alimentar una casa, oficina o un pequeño negocio. Así mismo, existen plantas de luz cuyo rango va desde 5 hasta los 2,000 KW, los cuales están capacitados para abastecer toda una zona industrial.
- Plantas de gasolina: Este tipo de generador trabaja de manera similar que la planta de diesel, la diferencia es que en este caso se usa gasolina como combustible. En comparación con el diesel, la gasolina es más fácil de encontrar, pero tiene un mayor grado de riesgo por su volatilidad y por ser inflamable. Para evitar accidentes con este tipo de combustible, se debe ser extremadamente cuidadosos.
- Plantas de gas propano: Al ser el gas propano un recurso abundante, el tamaño de estos generadores suele ser más pequeño, en comparación con los otros dos tipos de plantas. Aunque su tamaño puede ser inferior, su eficiencia llega a ser más duradera, sin embargo en ocasiones puede llegar a ser una opción más costosa por la variación en los precios del gas dependiendo de cada región. Por consiguiente, si el precio es alto, el generador también lo es.